El valle feliz. Anne Marie Schwarzenbach
Anne Marie Schwarzenbach pertenece al tipo de mujeres de finales del siglo XIX y principios del XX que pasaron gran parte de su vida viajando, ya fuera por pasión, necesidad, o por su profesión. Así tenemos a Emilia Serrano de Wilson, granadina que, al quedarse viuda, viajó durante treinta años por América; Carmen Burgos (Colombina), almeriense y la primera cronista de guerra, viajó por todo el mundo y escribió sobre lo que veía en cada país; Helen Caddick que viajó por Oriente; la pintora Marianne North, también viajera por Oriente; Freya Stark que viajó por Oriente Medio y cuyo apodo fue la “reina nómada”. La lista es aún muy larga y a ella pertenece igualmente la escritora que nos ocupa hoy. Anne Marie Schwarzenbach era doctora en filosofía, arqueóloga, periodista, fotógrafa y novelista. Perteneciente a una de las familias más ricas de Suiza; nunca aceptó las reglas y la vida de la clase social a la que pertenecía; mantuvo una estrecha amistad con Klaus y Erika Mann, hijos de Th